jueves, 28 de julio de 2016

La obsesión de Iglesias es el Psoe.

Pablo Iglesias parece obsesionado con el Psoe, lo suyo es de amor y odio, por un lado quiere que los votantes y militantes de los socialistas se pasen a Podemos, quiere formar gobierno con Sánchez siempre y cuando el sea vicepresidente y además su partido controle ciertos ministerios, continuamente lanza acusaciones contra los del puño y la rosa queriéndoles enmendar la plana y decidir por ellos la ruta a seguir. Es como el Anguita de los viejos tiempos, que no dudó en aliarse con Aznar para derrocar al Psoe, porque se habían salido del camino. 
Desde luego es confortable que piensen tanto en tí, que no te dejen ir solo por esos caminos de dios, que te guíen hacia la luz y velen por que no caigas; yo también quiero a un ángel de la guarda, aunque preferiría que fuese Errejón, porque Iglesias es para mí un tanto pedante e insoportable, es más no aguanto su tono monótono, no entiendo como podían sus alumnos aguantar sin dormirse.

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Proverbio castellano

Quien no oye consejo, no llega a viejo.