¿Y si cambiamos de políticos?, no sería mala idea poder mandar a paseo a muchos de ellos, hacer borrón y cuenta nueva. Pero antes cambiando cosas, primero con una nueva ley de partidos que los haga más participativos y que impida que unos manejen a otros y que saque de su seno a los corruptos, segundo modificando la ley electoral cambiando circunscripciones, permitiendo listas abiertas, renovando las cámaras parcialmente dentro de la legislatura, y compensando a los partidos que obtengan determinado número de votos.
Los políticos deben entender que están para servir a la sociedad y no para llenarse los bolsillos, que representar no significa presentarse en una lista y después olvidarse de los electores, que son la voz de los ciudadanos antes que la de sus partidos, que deben rendir cuentas de lo que hacen, no solo de lo que dicen, que su actuación debe ser transparente y supervisable por los ciudadanos,... es decir, todo lo que actualmente no son.
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