viernes, 14 de octubre de 2022

Renovación del CGPJ en cumplimiento de la ley vigente y sin chantajes.

Se establece en nuestra Constitución el Poder Judicial, los derechos y las obligaciones de los jueces, y los límites de este tercer poder.

La ley Orgánica del Poder Judicial regula el gobierno de los jueces, las formas de acceso a la carrera judicial, la forma de elegir y constituir a los órganos. Recordemos que las leyes emanan del poder legislativo y que por tanto son los representantes del pueblo los que las aprueban correspondiendo su cumplimiento a todos los españoles incluidos los políticos y los jueces y magistrados.

Que haya partidos que no estén de acuerdo con la actual forma de elección del CGPJ, y que incluso en el seno de la magistratura existan asociaciones que tampoco estén de acuerdo, no los exime del cumplimiento de la norma vigente. Y no valen los chantajes, la amenaza de la no renovación sino se cumplen sus exigencias, porque que yo sepa todos estamos obligados por la ley vigente.  Que los miembros “conservadores” del CGPJ se hayan revelado contra la ley es algo que debería estudiarse por si constituye algún tipo de falta o delito.

El hecho de ser el tercer poder debería ser matizado, es un poder que vela entre otras cosas por evitar que los otros poderes actúen en contra de la ley existente, vamos que los actos gubernamentales y parlamentarios sean ajustados las normas que se han dictado por los poderes competentes.

Y repito que la ley está para cumplirla, y ni los partidos ni los jueces, ni sus asociaciones pueden eludir su cumplimiento. Si alguien no está de acuerdo y quiere modificar la ley existente que siga el procedimiento establecido en la constitución y demás normas, es decir que lleve al parlamento la propuesta legislativa correspondiente y logre la mayoría necesaria para su aprobación, pero chantajear para permitir renovar es un fraude que este país no se puede permitir.

Por cierto, no hubiera pasado nada si no solo el presidente del CGPJ, sino todos sus miembros hubieran dimitido, hemos de recordar que se han dado dimisiones de este tipo en mandatos anteriores cuando finalizaban sus mandatos. El señor Lesmes no puede atribuirse ahora la valentía de forzar a los poderes políticos al presentar su dimisión, quizá debería haberlo hecho algunos años antes.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Estrangular el CGPJ es una táctica seguida por la derecha en varias ocasiones, con la que además de seguir nombrando jueces conservadores en el Supremo e incluso en las audiencias, informa contra las propuestas legislativas del gobierno progresista.
Se debería obligar a la dimisión automática en los finales de mandato.
Saludos

Anónimo dijo...

Tras el aparente desatasco fruto de la reunión Sánchez-Feijóo volvemos a la normalidad y es que el PP cuando está en la oposición siempre actúa dinamitando la estabilidad del estado de derecho, incumpliendo las obligaciones que como alternativa le corresponden. La miopía de los niñ@s del PP es demencial,.... para ell@s la cuestión es gobernar o joder.

Proverbio castellano

Quien no oye consejo, no llega a viejo.