La debacle socialista en las elecciones andaluzas es un hecho, el Psoe ha perdido la confianza de su nicho más importante perdiendo votos y escaños, pero el problema es más profundo porque significa que las actuaciones del gobierno de Sánchez no se perciben en esta comunidad.
El PP de la mano de Moreno con una campaña muy tranquila, en la que daba por hecho su victoria porque lo han hecho bien y por tanto se les debe permitir continuar en el gobierno, pero además pidiendo manos libres para gobernar, sin la atadura de Vox ni de nadie. A esta campaña sin duda ayuda la prepotencia con la que ha actuado Macarena Olona, algo que en mi opinión ha creado rechazo, y desde luego la división de la izquierda que una vez más ha hecho gala de siglas marcando unas diferencias artificiales que de hecho no existen para justificar la división, votarlos significaba sin duda tirar votos. Por otro la falta de conexión con la población del candidato del Psoe, si alcalde de Sevilla pero desconocido en el resto de la comunidad al no haber tenido presencia en el parlamento andaluz, no era diputado, pero es que además la campaña de los socialistas incidiendo fundamentalmente en el riesgo de que Vox entre en el gobierno y que no contarían con su abstención en el caso de no obtener mayoría suficiente, ha fomentado que muchos hayan cambiado el voto hacía el PP. Tampoco han sabido Espadas y los ministros y demás dirigentes nacionales que han venido a Andalucía vender lo que el gobierno socialista está haciendo: la gestión de la pandemia, las medidas anticrisis, la reforma laboral,…. Muchas son las cosas hechas y muy mal se han comunicado/vendido a la población.
Y hoy tras la debacle y la falta de autocrítica el presidente del gobierno anuncia medidas extraordinarias para que los ciudadanos se vean menos afectados por la crisis, y para disminuir la inflación. ¿No podían haberlas aprobado hace un par de semanas?. No, porque se han dedicado a discutir en el seno del gobierno y sobre todo se han propuesto vocearlo en los medios de comunicación, tanto los miembros de Podemos como los socialistas, para dar la sensación de división.
Al gobierno le queda un poco más de un año para las elecciones generales, en un contexto bastante complejo desde el punto de vista económico, y con el hándicap de que los miembros de la coalición van a intentar marcar posiciones, lo que también harán aquellos que lo sustentan en el parlamento. Esperemos que no sigan demorando la toma de decisiones importantes o metiendo la pata en el entorno internacional, caso de Argelia. Porque señores Sánchez y su gobierno han de espabilar.
2 comentarios:
Sánchez lo tiene complicado, no solo no han tenido éxito al explicar lo mucho que ha hecho el gobierno sino que además internamente ha de luchar con las discrepancias entre los coaligados, y con la necesidad que tiene Podemos de visibilizar su posición en cada punto.
Ayer sábado el gobierno lanzó sus nuevas medidas antiprecios, no se si la realidad será tozuda y no servirán para nada, caso de la subvención de las gasolinas que el mercado se la ha llevado por delante. La actual situación me hace considerar con mayor fuerza la necesidad de tener empresas estatales que compitan con las privadas y de esta manera evitar estos cárteles de precios que tan solo benefician a esas grandes corporaciones. Ah!!! y aplicar desde ya el impuesto a los beneficios caídos del cielo a eléctricas y energéticas.
El mercado es egoísta por naturaleza y algunos están haciendo su agosto a costa de los ciudadanos.
Joseph
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