martes, 3 de mayo de 2022

Pegasus, cachondeo nacional.

Mi padre conducía un camión Pegaso, y no se si se lo habrán pinchado, porque ahora  todos y todas son susceptibles de que el gran software de espionaje israelí infecte sus terminales y les robe datos. Primero a los nacionalistas catalanes, grandes defensores de la libertad especialmente si a ellos se refiere, y ahora también al mismísimo presidente del gobierno y a su ministra de defensa, que oportuno descubrimiento un año después de producirse el hecho, gracias a la gran eficiencia de nuestros servicios secretos especialmente los encargados de la ciberseguridad.

Yo también quiero que me espíe pegasus, al menos sería una muestra de que soy importante, aunque ya estoy espiado por Google, Meta y demás demonios de la red que siempre están dispuestos a almacenar información de mis gustos, de mis ideas o simplemente de mis conversaciones. Porque la red es sensacional y nunca olvida, podemos comprobarlo en todos los affaires que se producen, donde aparecen conversaciones de wasaps, de Facebook, de Instagram,… o simplemente grabaciones de nuestras conversaciones. Internet es algo muy serio que no solo ha derribado fronteras sino que pone en riesgo nuestras libertades y nuestra privacidad, amén de nuestros ahorros.

La más importante conclusión a la que llego es que los recursos del gobierno han de actualizarse, la seguridad en las comunicaciones y en los datos es esencial, por tanto hemos de contar con equipos que lo aseguren, el antiguo concepto de espía es algo obsoleto, ahora hablamos de ciberespia. Hay gobiernos que desde hace tiempo han hecho del ataque cibernético una forma de lucha, una manera de atacar al enemigo, de robarle datos e ideas, de influir a través de robots en las opiniones públicas,… y todo sin necesidad de enviar a nadie en persona, porque como actualmente se dice los que se dedican a estas tareas teletrabajan. De todos es conocido cómo los servicios secretos rusos a través de la red se han inmiscuido en la política americana o en la española con la causa catalana, y eso es lo poco que conocemos, porque supongo que no saldrán a la luz muchos ataques que nos dejarían como quien dice desnudos y en ridículo.

Porque volviendo al caso del espionaje con pegasus, ese es mi sentimiento actual, que el gobierno y nuestro país ha hecho el ridículo, al no tener ni las personas ni los medios necesarios para trabajar con seguridad. Está claro, al menos para mí, que la estructura de la administración no solo es obsoleta sino que además peca de ser tan rígida que es casi imposible adaptarla a los tiempos en los que vivimos. Porque, esto de pegasus se ha unido a la clara ineficacia e ineptitud que han mostrado la mayoría de las AAPP en estos años de pandemia.

Total que mejor tomarlo a cachondeo, porque debemos de dar gracias a que no somos tan importantes, sino que más bien somos mediocres y no pintamos demasiado en este mundo. 


3 comentarios:

Pablo dijo...

Estoy de acuerdo, estamos en pañales en ciberseguridad. La defensa corresponde sin duda al CNI, detección y respuesta ante los ciberataques. Es cierto que la seguridad de las comunicaciones del gobierno y la administración frente a ataques de malware correspondería a los servicios de informática y comunicaciones, pero la defensa frente a ataques organizados que afecten a la seguridad del país y al secreto de las decisiones y actuaciones gubernamentales procedentes de potenciales organizaciones enemigas ya internas o externas le corresponde al CNI. Que cada palo aguante su vela.
Saludos

Pedro dijo...

La defensa de un país actualmente radica más en su capacidad para poder responder a los ataques o mejor dicho ciberataques, el mantenimiento seguro de la información y de la documentación, permitiendo unas comunicaciones en las que se asegure la confidencialidad, la seguridad y sus contenidos fidedignos. Que en tener muchos aviones, carros de combate, misiles,....
Invertir en ciberseguridad es esencial incluso en todos los órdenes de la vida de un país,...
Salud

Paul dijo...

Completamente de acuerdo, yo añadiría que dado que algunas potencias se dedican a crear bots que influyan en la opinión pública de otros países, el ejemplo las elecciones presidenciales americanas y la cuestión catalana, es necesario contar con sistemas que nos permitan detectar estas intromisiones y anularlas.
Buen día.

Proverbio castellano

Quien no oye consejo, no llega a viejo.