Siguen los disparates independentistas.

Estos independentistas siguen y siguen, a su hábito de mentir y de expresar las cosas siempre de forma favorable para ellos y desfavorable para el estado español, unen su manía de echar las culpas al gobierno central. Hace pocos días el señor Puigdemon achacaba a manejos del estado el no poder viajar a Canada, rápidamente culpó a las autoridades españolas cuando todo se trataba de su error al no haber solicitado el visado a través de la oficina canadiense oficial. Este mismo político fue entrevistado por una cadena nacional de televisión y cuando le preguntaron su opinión acerca de la resolución judicial que le permite ser candidato a las europeas, a petición de la fiscalía, fue incapaz de admitir que nuestra justicia es independiente y obra en base a las leyes y no a las instrucciones o directrices del gobierno.

Otro disparate fue la conmemoración de los asenatos de españoles en los campos de concentración nazis, la ministra de Justicia se vio sorprendida por las declaraciones a pie de muro de una directora general del gobierno catalán, ésta llegó a comparar a los encausados y juzgados actualmente en el Supremo con los republicanos represalidados y asesinados en los campos de exterminio durante la Segunda Guerra Mundial. Ya se que los partidos separatistas y el indepentismo en general necesitan tener "mártires" para seguir alimentando la causa y achacar sus problemas al estado central.

Ahora tras el triunfo socialista en las elecciones generales y el gesto del actual presidente de elegir a Iceta como candidato a presidir la cámara alta, una muestra de su intención de diálogo al colocar a un catalán como presidente del Senado que es el órgano encargado de aprobar la aplicación del artículo 155, los partidos independentistas exigen contrapartidas para permitir que Iceta sea elegido senador por el parlamento catalán.

Total que nos seguimos encontrando con el inmobilismo de unos podíticos abducidos por cuestiones de fe, que no llegan a respetar las opiniones de otros y que además siguen poniendo obstaculos al diálogo, todo lo hacen en base a contraprestaciones o líneas rojas antes de sentarse y hablar. No asumen su gran responsabilidad en el resurgimiento de movimientos extremos y nada democráticos ,de los que pensábamos que estabamos exentos, y que ahora se sentarán en las cámaras. En fin, asi nos va.
Lo último de los separatistas es el veto al socialista Iceta para que fuera senador y aspirara a la presidencia del Senado, ¿por qué estos partidos han roto una tradición que siempre permitía que cada formación eligiera a su senador?, los argumentos dados por ellos han sido que se enteraron por la prensa antes de que los socialistas se lo indicaran o porque se está produciendo una utiliación torticera del parlament,.... ante lo que yo me pregunto si tan solo era una forma de llamar la atención al futuro presidente en el sentido de que el problema catalán sigue ahí y que es necesario contar con ellos porque sino la legislatura no será cómoda. Sea lo que sea lo que si han conseguido es cabrear a los socialistas y poner un nuevo obstáculo al diálogo y la negociación.