Cuando vi el resumen del partido entre el Barcelona FC y el Real Madrid recordé la "lucha" entre los independentistas y los constitucionalistas, durante el partido se vieron entradas fuertes y sin necesidad, acciones teatrales con objeto de engañar al árbitro y presiones individuales y conjuntas para condicionar la actuación del juez de la contienda.
El símil radica en las zancadillas que continuamente se intentan hacer políticos de ambas tendencias, la teatralidad y las mentiras en las que se basa mucha de la ideología independentista y la presión que se realiza en las calles y sobre políticos y ciudadanos de distinta ideología. A todo esto hay que añadir la utilización del fútbol en la lucha política, la asociación de banderas y símbolos, los estadios se llenan de colores amarillos, de señeras, a lo que comienzan a responder las banderas de España. Es gracioso, o al menos a mi me lo parece, asociar un club con una idea nacional o política, las declaraciones de los dirigentes del Barcelona hablando de presos políticos, de libertad de expresión,... ni que todos los seguidores y socios de ese club fuesen independentistas. Y si nos vamos a las alineaciones, ¿cuántos jugadores independentistas e incluso catalanes hay en ese club?, ni en la Masia los hay.
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