El desliz de Zapatero en una copa con los medios de comunicación está siendo sonado, cuando la cuestión sucesoria parecía olvidada unas palabras a destiempo han tenido demasiada repercusión. Los comentarios de los allí presentes son diversos, unos opinan que hablaba en serio y que su comentario indicaba que no se iba a presentar, otros lo contrario que era una broma ante tanta insistencia de los periodistas, sea como sea lo cierto es que ha levantado la caja de los truenos en un momento en el que las elecciones municipales y autonómicas están a la vuelta de la esquina, y cuando desde algunas comunidades se habían alzado voces pidiendo que el Secretario General del Psoe se pronunciase de una vez con claridad.
Tanta polémica desaparecería si nuestra legislación limitara a dos legislaturas, ocho años consecutivos, la permanencia de un candidato en la presidencia del gobierno, con ello facilitariamos por un lado la "sucesión" y por otro lado la renovación de las personas que están al frente del gobierno y de los partidos, dinamizando la vida política e impidiendo que los líderes se eternicen.
Y puestos a pedir quizá también haya que pensar en buscar medios para medir la confianza de los españoles en sus presidentes, como la renovación parcial de alguna de las cámaras en mitad de la legislatura, ello contribuiría a indicarle claramente a los presidentes cual es el sentir de los cuidadanos permitiéndoles revisar las políticas que realizan.
Bueno, creo que nuestra joven democracia tiene aún que realizar ciertos ajustes, pues nuestra Constitución aunque novedosa y progresista en su tiempo necesita ciertos retoques para adaptarla al momento actual y especialmente al futuro que nos espera.
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