miércoles, 16 de febrero de 2022

¿ Pero esto es política ?, o ¿son ustedes unos politicuchos?

No se si la política se ha degenerado o si los que se llaman políticos no dan más de si y son unos auténticos zopencos. El caso es que pensaba que lo había visto y oído todo, y ahora me doy cuenta de que no es así. Si nos centramos en el parlamento hace ya tiempo que sus miembros no se escuchaban, cada uno iba a lo suyo, el gobierno buscando apoyos e intentando sacar adelante sus normas y la bancada de la oposición dedicada a decir no a todo y al insulto y el menosprecio.

Pero es que el otro día asistí, en diferido claro, a la votación de la reforma laboral del gobierno, esta vez sin el apoyo de ER, PNV y HB o como se llamen ahora, teniendo que recurrir a Ciudadanos y “acojonados” porque lo tenían todo cogido con alfileres. Claro que nadie pensaba que aún hay políticos, o politicuchos, que dicen una cosa y hacen otra, y parece que en ciertos ambientes de la derecha no hay problema. Los diputados de UPN dieron una lección de talante político cambiando su voto a última hora no haciendo caso de su ejecutiva y permitiendo casi la victoria del NO que propugnaban PP y VOX. Aunque el tiro le salió por la culata porque uno de los suyos se equivocó en el voto telemático, impidiendo la derrota del gobierno. Efectivamente se equivocó, no se sabe cómo, pero lo hizo y con ello permitió la aprobación de una reforma que aunque no era de la satisfacción de todos si que beneficia a gran cantidad de trabajadores/as, las posiciones maximalistas de ER y del PNV casi logran una crisis de gobierno y el final de la legislatura. Lo que ha venido después es algo demencial, lo que se han permitido decir los dirigentes del PP sobrepasa en mucho la línea de la corrección y el respeto.

Para colmo llegan las elecciones de Castilla y León, con sorpresas mayúsculas, pues lo que se preveía como una victoria abrumadora del PP, razón por la que se adelantaron los comicios, se convirtió en victoria pírrica, con VOX acelerando y exigiendo formar parte del gobierno si quieren su apoyo, lo que supone la convivencia de la extrema derecha de los populares, veremos lo que pasa. Estas elecciones a su vez han puesto de manifiesto cómo se encuentran los apoyos del Psoe y de Podemos, el primero ha perdido su posición dominante con siete procuradores menos y el segundo casi desaparece, como Ciudadanos. Por el contrario, no solo la extrema derecha ha subido exponencialmente, sino que han aparecido los partidos localistas de la España vaciada, Soria, León y Ávila, en total siete escaños, ¿acaso vamos a volver a los reinos de taifas?. Su nacimiento se veía venir, los problemas de estas provincias son acuciantes, sus economías no permiten que sus habitantes se mantengan en sus poblaciones y el éxodo a las ciudades no para, un gran problema para el país que no creo que se resuelva con los localismos pero que es una llamada de atención hacía los partidos nacionales que se han olvidado de ellos. Ante todo esto, hemos visto de nuevo a Casado dando bandazos, desde posiciones muy cercanas a Vox, hasta ahora declaraciones en las que se desmarca por completo de ellos.

Creo que Pablo Casado es un fraude para la derecha española, alguien que no es capaz de separar el sentido de estado, los intereses de ESPAÑA en mayúsculas, de la política de partido, de la lucha a muerte por el poder bajo el lema de “todo vale si con ello echamos al gobierno de Sanchez”, no le  importa ir a Europa para despotricar del gobierno y de su país si con ello piensa que obtendrá réditos. Señores del PP, miren lo que tienen en la presidencia, evalúen si merece la pena mantener como líder a alguien sin preparación, sin experiencia, pero que además tiene una ambición desmedida. Hay mucha gente de valía en el PP, y la verdad no entiendo como este politicucho y los voceros que le acompañan han logrado copar el poder.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

El ambiente político está enredado, al ascenso de la extrema derecha se une la falta de sentido político. A veces parece más una pelea de navajeros que una lucha dialéctica basada en propuestas y discrepancias objetivas y motivadas. Y lo peor es que son los jóvenes políticos los que así lo hacen. Siempre he pensado que para ser diputado, miembro del gobierno, o dirigente de un partido hay que tener una experiencia contrastada, eso no supone delegar a los jóvenes, pero las prisas son malas consejeras y una de las cosas que deben aprender los bisoños políticos es tener paciencia.
Saludos

Anónimo dijo...

Lo que le faltaba a Casado en su lucha con Ayuso, investigación interna de Génova para determinar si hubo actuaciones ilícitas en un contrato a una empresa próxima al hermano de la presidenta madrileña, algo que ya salió en la Asamblea de Madrid. La lucha interna en el seno del PP no cesa, ¿Casado en la picota?.

Lucas dijo...

Yo es que me meo de la risa con estos jóvenes politicuchos, sin experiencia y sin formación suficiente han llegado a la cúspide de sus partidos y no saben lidiar con los problemas. Ahora guerra total entre Casado, presidente sin nada que aportar, y Ayuso presidenta de Madrid y estrella del electorado popular.
Mi apuesta es que Pablo Casado va a caer.

Julia dijo...

En esta lucha política hay que aplicar el refrán "a rio revuelto ganancia de pescadores", y aquí tiene Ciudadanos alguna oportunidad, por ejemplo moción de censura en el Ayto de Madrid.

Manuel dijo...

Pues se nos habían olvidado a las jóvenes ministras del gobierno, Belarra y Montero, ambas nacidas en el seno del partido y elevadas por Pablo Iglesias. Experiencia ninguna, eso sí dogmáticas a más no poder, lo suyo ha llegado a la cima cuando se oponen al envío de armas a Ucrania y hablan de potenciar la diplomacia de precisión, ¿qué será eso?. No se si es que no han visto las imágenes de la invasión de Ucrania y los destrozos que el ejército ruso está haciendo en las ciudades y en la ciudadanía ucraniana.
No acabo de entender cómo se pueden tener ministros con esa gran experiencia

Proverbio castellano

Quien no oye consejo, no llega a viejo.